Si tienes el tiempo y la paciencia, puedes hacer crecer un árbol de ginkgo tú mismo a partir de un esqueje. Pero para esto necesitas brotes de una planta sana y fuerte. Corta varias ramas a la vez, la tasa de éxito es baja.

¿Cuándo y cómo se cortan los esquejes?
Idealmente, corte sus retoños cuando los brotes comiencen a lignificarse lentamente. Se nota por la decoloración marrón. Esto suele ocurrir en junio o julio. Si los brotes son demasiado blandos, se pudren fácilmente, si ya son demasiado duros, se arraigan mal.
Corta los brotes seleccionados de unos 20 a 30 centímetros de largo justo debajo de un nudo o base de la hoja y quita la hoja inferior. En la parte superior, corte el brote hasta que solo quede el brote sólido con dos o tres hojas. Ahora debería medir entre ocho y diez centímetros de largo.
¿Cómo se mantienen los vástagos?
Incluso en buenas condiciones de crecimiento, solo alrededor del 30 por ciento de los esquejes cortados echan raíces. Use un medio de cultivo especial o una mezcla de turba y arena. Antes de insertar los esquejes, trate la superficie del corte inferior con polvo de enraizamiento. A continuación, coloca las macetas (16,68 €) en un lugar cálido, luminoso y alejado de la luz solar directa.
Ahora mantenga sus brotes uniformemente húmedos, una película de plástico o una cubierta pueden ser útiles. Reduce la evaporación de la humedad, pero no debe tocar los esquejes. Asegúrese de airear sus esquejes regularmente, de lo contrario, comenzarán a pudrirse o enmohecerse fácilmente. En el primer invierno, los ginkgos jóvenes aún no son resistentes.
Lo esencial en resumen:
- Corte los brotes justo debajo de un nudo justo antes del crecimiento leñoso
- quitar hoja inferior
- cortar la punta blanda
- Dejar 2-3 hojas
- Sumerja el extremo inferior en polvo de enraizamiento
- Stick retoños en el sustrato de crecimiento
- poner en un lugar cálido y brillante
- mantener uniformemente húmedo
consejos
El calor y la humedad constantes y la protección contra el moho y la podredumbre son importantes para el enraizamiento exitoso de sus esquejes.