El error de cuidado más común con la mimosa es el riego. O la planta se riega con demasiada frecuencia o muy poco. ¿Cómo se vierte correctamente una mimosa y a qué hay que prestar atención?

Vierta la mimosa con delicadeza
Mimosa no tolera la sequía completa ni tolera demasiada humedad.
Por lo tanto, riega una mimosa con mucho cuidado. Solo cuando la superficie del suelo se ha secado se riega la planta. ¡Haz la prueba del dedo! Vacíe inmediatamente el agua del macetero o platillo para evitar que se encharque.
Use agua blanda para regar, porque la mimosa no tolera el agua dura. El agua de lluvia es mejor para regar las mimosas.
consejos
Las mimosas necesitan suficiente humedad. Esto puede ser un problema, especialmente en invierno, cuando el aire seco provoca una infestación de araña roja. Aumente la humedad colocando tazones de agua.