- ¿Las hojas son venenosas?
- Características externas de las hojas.
- Las enfermedades dejan marcas en las hojas.
- consejos y trucos
Cualquier persona que los manipule debe lavarse bien las manos después. Las hojas del dedal literalmente dan un golpe. ¿Cómo puedes reconocerlos? ¿Qué más deben saber los jardineros sobre ellos?

¿Las hojas son venenosas?
Como todas las demás partes de la planta dedalera, las hojas son venenosas. Las cantidades máximas de los llamados digitaloides se encuentran en los tallos y hojas en particular. Estos afectan el ritmo cardíaco. Lo que suena inofensivo puede ser mortal.
Dos hojas de un dedal pueden significar la diferencia entre la vida y la muerte para un adulto. Los niños y los animales están particularmente en riesgo. Por lo tanto, nunca se deben plantar dedaleras en jardines con niños y mascotas.
En el peor de los casos, el envenenamiento por las hojas de la dedalera puede terminar en un paro cardíaco. La intoxicación por encendedor se puede reconocer por los siguientes síntomas, entre otros:
- náusea
- Vómito
- Diarrea
- alucinaciones
- alteraciones visuales
- delirio
- arritmia cardíaca
Características externas de las hojas.
Puedes reconocer las hojas por las siguientes características externas:
- ajuste alterno
- Hojas basales pecioladas, hojas del tallo sésiles
- ovada a lanceolada
- hasta 20 cm de largo
- muesca en el borde
- velludo de fieltro grisáceo por debajo
Las hojas basales de la dedalera forman una roseta. En el primer año, esta roseta de hojas se desarrolla en el suelo. Las flores aparecen al año siguiente. No es raro que las hojas se confundan con malas hierbas y se eliminen. El fin de la perenne dedalera…
Las enfermedades dejan marcas en las hojas.
Cualquiera que haya plantado la dedalera puede asustarse cuando le salen hojas feas, no florece y se lleva una existencia miserable. A veces se enferma. Estos incluyen el mildiú polvoroso y la enfermedad de las manchas foliares (virus).
Tan pronto como las hojas comienzan a mancharse de blanco, de repente se vuelven marrones o se enroscan, es una señal de alarma para que el jardinero reconsidere el cuidado y preste más atención a la dedalera.
En el caso del mildiú polvoroso, las partes afectadas de la planta deben retirarse y desecharse. Para evitar el desarrollo de enfermedades fúngicas, un buen drenaje de la dedalera y un buen suministro de nutrientes son las principales prioridades.
consejos y trucos
Para los cautelosos: las hojas se pueden usar externamente como cataplasma para promover la cicatrización de heridas.