Gypsophila prefiere un lugar soleado, cálido y, sobre todo, seco. Entonces te complacerá con una exuberante floración. Las plantas perennes altas también se pueden proteger del viento para evitar que se vuelquen.

¿Qué suelo necesita la gypsophila?
Sobre todo, el suelo para gypsophila debe ser suelto y permeable, porque Gypsophila paniculata, como se llama en latín, no tolera en absoluto el encharcamiento. El suelo puede ser ligeramente calcáreo. Dale a tu gypsophila perenne un soporte estable para que no se caiga al suelo con la primera ráfaga de viento. Planta gypsophila en una maceta o jardinera, luego asegura una buena capa de drenaje.
Los consejos de ubicación más importantes:
- cálido y seco
- tan soleado como sea posible
- suelo suelto permeable
- suelo ligeramente calcáreo
- ideal para gypsophila baja: muros de piedra seca
- variedades altas protegidas del viento
consejos y trucos
Si planta la gypsophila en una pequeña colina, el exceso de agua puede drenarse fácilmente y, si es necesario, regar las plantas vecinas sedientas.