- el ambiente esta mal
- El balance de nutrientes está desequilibrado.
- Se eligió la ubicación incorrecta
- Una plaga de ácaros
Por lo general, son la característica más bonita del abeto paraguas japonés. Son brillantes, de color verde oscuro, coriáceos y se paran juntos en estructuras parecidas a paraguas. Pero si las agujas, que miden unos 10 cm de largo, de repente se vuelven amarillentas, puedes dejar de ser descuidado.

el ambiente esta mal
La razón más común para las agujas amarillentas es la sequedad. El abeto paraguas japonés depende de mucha humedad. Como es una raíz poco profunda, no puede llegar a las aguas subterráneas y depende del agua de arriba. La sequedad persistente significa estrés para ellos y, como resultado, las agujas se vuelven amarillentas.
Los abetos paraguas en tinas están particularmente en riesgo. Aquí debes tener cuidado de que el cepellón nunca se seque. En el caso de los abetos paraguas japoneses al aire libre, puede, como precaución, cubrir el área de la raíz con corteza, por ejemplo.
Mucho más raramente, esta planta está demasiado húmeda y sufre de anegamiento. El anegamiento y la podredumbre que lo acompaña también pueden provocar agujas amarillas. ¡Evite plantando sus coníferas en un suelo medio-pesado bien drenado!
El balance de nutrientes está desequilibrado.
Los nutrientes también pueden jugar un mal papel en el abeto paraguas japonés:
- Sobrefertilización: Las agujas dentro de la conífera primero se vuelven amarillas y luego se desprenden.
- Deficiencia de potasio: surge rápidamente con demasiada lluvia (enrojecimiento)
- Deficiencia de nitrógeno: asociada con un crecimiento más pobre
- Falta de oligoelementos como magnesio, boro, hierro y zinc.
- El suelo contiene demasiada cal
- si es necesario, fertilice una vez al año con fertilizante de abeto o compost
Se eligió la ubicación incorrecta
Las siguientes características de ubicación pueden hacer que un abeto paraguas japonés se vea viejo/amarillo rápidamente:
- mucho calor/calor
- demasiado sol, especialmente al mediodía (quemaduras solares, agujas secas)
- aire demasiado seco
- El suelo contiene demasiada cal, es demasiado arcilloso y demasiado pesado
Una plaga de ácaros
En casos más raros y más probables en cultivo en tina, una infestación de ácaros provoca agujas amarillas. Estos animales chupan las agujas en la parte inferior. Con el tiempo, las agujas pierden tantos nutrientes que se desvanecen. Una ducha vigorosa ayuda a eliminar los ácaros.
consejos
Si no se cambia la ubicación o el cuidado, las agujas amarillas a menudo son seguidas por agujas marrones, que pronto se caerán o se cortarán.