En Japón, los rododendros simbolizan la primavera. Se les conoce bajo el nombre colectivo de Satsuki y, como el pino y el arce, son particularmente populares en el arte del bonsái debido a la variedad de especies. Traducido, el nombre del género significa rosal.

Especies apropiadas
El género Rhododendron incluye más de cien especies y más de mil formas cultivadas. Los especímenes con hojas pequeñas y coriáceas son adecuados para el diseño de bonsáis. Estos son de hoja perenne y conservan su follaje durante los meses de invierno. Dichos representantes tienen su origen en los países asiáticos. Dependiendo de la variedad, el período de floración se extiende desde la primavera hasta el verano. Las variedades florecen de blanco a amarillo y de rosa a rojo, azul y violeta en todos los colores imaginables.
Azaleas adecuadas como bonsái de exterior:
- Azalea japonesa: Rhododendron obtusum (japonés: Kurume tsutsuji)
- satsuki azalea: Rhododendron indicum (japonés: Satsuki)
- **Kaempferis Azalea*: Rhododendron kaempferi (Japonés: Yama tsutsuji)
opciones de diseño
Los rododendros son adecuados para casi todos los estilos. Forman un hermoso nebari y se caracterizan por un rápido crecimiento. Las azaleas se ramifican bien en todo el tronco, lo que les permite desarrollar muchos niveles en un corto período de tiempo. Una poda drástica no es un problema debido a esta habilidad y a menudo se usa como método de peinado.
Dar forma a un bonsái
Durante el período de crecimiento, las plantas jóvenes se podan a intervalos de seis a ocho semanas. Justo antes de la floración, elimine los brotes que crezcan abruptamente hacia arriba o que apunten hacia abajo. Seleccione los botones florales para que el árbol no ponga demasiada energía en la floración. Los brotes jóvenes que se desarrollan cerca de los brotes se rompen.
Después de la floración, corte los nuevos brotes cuando hayan alcanzado los tres o cuatro centímetros de longitud. Para obtener más volumen en la corona, puede acortar los brotes del año anterior a uno o dos pares de hojas. Asegúrate de acortar la parte superior de la copa del árbol lo menos posible. Esta parte es el área con la tasa de crecimiento más baja de rododendros. Las intervenciones intensivas conllevan el riesgo de deshidratación.
Debes prestar atención a esto.
En el curso posterior, te concentrarás no solo en el crecimiento anual, sino también en las fuertes ramas viejas. El arte japonés recomienda quitar las ramas principales cuando el árbol tenga al menos doce años. Luego comience a dar forma nuevamente. De esta forma revitalizas el bonsái. Sin embargo, las ramas gruesas no deben cortarse hasta el anillo de ramas, porque las azaleas tienden a perder su savia.
cable
Las ramas más gruesas se pueden moldear con alambre de cobre después de la floración y la poda. Para que sea más fácil para el árbol, puede envolver el cable con cinta de papel. Si los brotes son demasiado jóvenes, existe el riesgo de lesiones porque la corteza es muy sensible. La madera madura es muy quebradiza y debe moldearse utilizando métodos de arriostramiento.