La especie, originaria de América Central y del Sur, ha conquistado los corazones de muchos jardineros aficionados. En su tierra natal, la capuchina se considera una valiosa hierba medicinal. Todas las partes de la planta son comestibles y proporcionan un ingrediente ligeramente picante.

Tanto las flores como las hojas de la capuchina son un enriquecimiento para cualquier ensalada

hojas

Alrededor de cuatro a seis semanas después de la siembra, las primeras hojas de la capuchina están listas para ser cosechadas. Son una adición deliciosa a las ensaladas o se pueden comer crudas con pan y mantequilla. Sus aceites de mostaza antibióticamente efectivos aseguran un sabor ligeramente picante.

Cuanta más sombra y nutrientes recibe la planta, más hojas forma. Debido a la gran masa de hojas, la planta necesita mucha agua. Cuando está seco, el aroma es menos intenso.

Si el cultivo es demasiado grande, puede secar el follaje en un lugar aireado y cálido. Se puede procesar en pesto. Esto requiere dos puñados de capuchina y aproximadamente la mitad de nueces. Medio diente de ajo, parmesano y aceite de oliva refinan el sabor.

flores

Entre julio y octubre aparecen flores amarillas, anaranjadas o rojas, que también son comestibles. Las ubicaciones a pleno sol fomentan la floración. Si cosecha regularmente los tallos de las flores o elimina los brotes marchitos, extenderá el período de floración. Su aroma es parecido al de la mostaza y más suave que el sabor de las hojas. Se utilizan para decorar ensaladas.

Consejos para recoger:

  • cosecha después de un día lluvioso
  • pellizcar toda la flor con el dedo
  • agitar vigorosamente ya que a las tijeretas les gusta esconderse en él
  • no lavar para conservar el polen

semilla

La especie anual muere después de una temporada. Con la ayuda de sus frutos partidos, la planta sobrevive en el suelo para que pueda brotar nuevamente la próxima primavera. Puede conservar las semillas de la capuchina encurtiéndolas en vinagre, sal y aceite como las alcaparras. Secas y almacenadas en la oscuridad, las semillas son adecuadas para el almacenamiento. Tienen una vida útil de hasta tres años y se pueden volver a sembrar cada año. Cuando se muelen, producen una especia parecida a la mostaza.

consejos

Una vez que la planta ha producido frutos, ya no debes comer las hojas. Son leñosas y menos aromáticas que el follaje joven.

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