La propagación a través de esquejes promete el mayor éxito, pero también es posible cultivar un olivo a partir del núcleo de la semilla. Sin embargo, se requiere mucho calor para una reproducción exitosa.

Propagación a través de esquejes
De un árbol existente, elija uno o más brotes que sean lo más jóvenes posible y que aún no estén lignificados. Estos deben tener una longitud de entre cinco y diez centímetros, y también deben tener algunos ojos. Si es posible, no corte el borde de corte en línea recta, sino en ángulo; esto facilitará que el corte absorba agua más adelante. Ahora haz lo siguiente:
- Llena una maceta pequeña con tierra para macetas.
- Retire las hojas inferiores del vástago.
- Inserte la rama allí y presione suavemente el suelo alrededor.
- Riega el brote ligeramente.
- En las siguientes semanas mantén el sustrato húmedo pero no mojado.
- ¡No fertilices!
- Coloca la maceta en un lugar iluminado y cálido, como el alféizar de una ventana.
- Las temperaturas entre 20 y 25 °C son ideales.
- Cuando se desarrollan hojas nuevas, el corte ha echado raíces.
¿Cuándo hay que trasplantar un olivo?
Los olivos son árboles de crecimiento extremadamente lento, por lo que es posible que no sea necesario trasplantarlos durante el primer año. Dependiendo del tamaño de la maceta que haya elegido, puede esperar incluso más tiempo antes de trasplantarla. Las macetas para aceitunas no deben ser demasiado grandes, de lo contrario las raíces se desarrollarán demasiado y se descuidará el crecimiento del árbol real. Las macetas que son aproximadamente un tercio más grandes que la copa del árbol son ideales.
Propagación a través de semillas
Un poco más difícil, pero de ninguna manera imposible, es la propagación de un olivo a partir de semillas. Sin embargo, solo puede usar los corazones de aceitunas frescas completamente maduras o semillas del comercio. Los corazones de las aceitunas encurtidas o procesadas de otra manera ya no son viables. Y así es como funciona:
- Libere el núcleo de la semilla de la pulpa que lo rodea.
- Remoje el núcleo en agua tibia durante 24 horas.
- Ahora ponlo en una maceta con tierra para macetas.
- Y cúbralo con tierra alrededor de una pulgada.
- Mantenga el núcleo húmedo, utilizando una botella de spray si es posible.
- Coloque la olla en un lugar luminoso y cálido con una temperatura de al menos 20 °C.
- Ten paciencia, las semillas pueden tardar algunas semanas en germinar.
consejos y trucos
También puede facilitar la germinación del grano de la semilla lijando la cáscara áspera con un poco de papel de lija y haciéndola más permeable.