Las plantas de interior que contienen toxinas pueden ser peligrosas en hogares con niños o animales. A los gatos en particular les gusta mordisquear las hojas de las palmeras y es casi imposible supervisar a las crías durante todo el día para que no mordisqueen las plantas por curiosidad.

Las palmeras reales no son tóxicas.
Las plantas de palma como la palma betel o la popular palma Kentia son fáciles de cuidar y no contienen sustancias tóxicas. Esto es diferente para las plantas que se llaman "palmas" en Alemania, pero que no son palmeras reales en absoluto.
- La palma de yuca (lirio de palma) contiene saponinas que son inofensivas para los humanos pero venenosas para los animales.
- La palma de Madagascar, que pertenece a las suculentas, es incluso una de las plantas venenosas más peligrosas y, por lo tanto, debe colocarse fuera del alcance de los niños o los animales.
consejos
No hay garantía de que una planta de interior sea completamente segura; incluso los fungicidas o insecticidas aplicados durante el cultivo pueden representar un riesgo para los niños o las mascotas. La única forma de estar seguro es poner las plantas fuera del alcance de sus compañeros de habitación de dos o cuatro patas.