El acebo japonés crece lentamente, alcanzando una altura máxima de dos a tres metros a lo largo de los años, lo que lo hace ideal para un jardín pequeño. También puede cultivarse muy bien como bonsái o plantarse como seto.

Las bayas del acebo japonés parecen tentadoras pero son venenosas

Desafortunadamente, el acebo japonés es venenoso. Las discretas flores de color blanco pálido dan lugar a bayas rojas o negras que son bastante tentadoras. Si tiene niños pequeños o mascotas jugando en su jardín, entonces el acebo japonés no debería ser necesariamente su primera opción. Es mejor no dejar que los niños pequeños jueguen cerca de esta planta sin supervisión y advertir a los niños mayores que no coman las bayas.

Lo esencial en resumen:

  • Las bayas son venenosas
  • Mantenga a los niños y las mascotas alejados de la fruta de acebo

consejos

Desafortunadamente, dado que el acebo japonés es venenoso, no pertenece necesariamente al jardín familiar.

Categoría: