- Las hojas a lo largo de la temporada de crecimiento.
- ¿Cuáles son las características de las hojas?
- ¡Las hojas son venenosas!
- ¿Utilizar las hojas para té o cataplasmas?
- consejos y trucos
Persistente y robusta: así es la aguileña. Pero también colorido, elegante y elegante. Pero hasta que sus flores se han desarrollado, es difícil de reconocer para el profano. Sus hojas son cualquier cosa menos ordinarias…

Las hojas a lo largo de la temporada de crecimiento.
En primavera, generalmente a partir de marzo, la aguileña sale con sus hojas. Cuando son jóvenes, las hojas se asemejan a pequeñas rosetas. Son de color verde claro y se oscurecen con el paso de las semanas. Después de que termina el período de floración en pleno verano y se forman las semillas, las hojas se marchitan. La aguileña se refugia en su rizoma.
¿Cuáles son las características de las hojas?
Las hojas caducas de la aguileña perenne junto con los tallos crean una imagen herbácea. Las hojas forman una roseta en la parte inferior. Allí están de tallo largo. Son dobles de tres en tres, con lóbulos redondeados, con muescas en el borde y parecen pinnadas.
Largos tallos brotan de la roseta basal. Aquí también hay hojas. Sin embargo, estos son sésiles. Además, su forma es ovalada alargada y no tienen muescas en el borde. Tanto las hojas del tallo como las hojas basales son de color verde azulado en la parte superior y de color verde grisáceo en la parte inferior. Además, aparecen pelos finos en la parte inferior.
¡Las hojas son venenosas!
Incluso 20 g de las hojas frescas pueden provocar síntomas de intoxicación después del consumo. ¿Por qué? Las hojas son venenosas y contienen, entre otras cosas, la sustancia tóxica magnoflorina y un glucósido formador de cianuro. Entre otros, pueden manifestarse los siguientes síntomas:
- obstáculo
- problemas respiratorios
- Diarrea
- Náuseas seguidas de vómitos
- arritmia cardíaca
¿Utilizar las hojas para té o cataplasmas?
Pero si secas las hojas o las calientas, no tienes que preocuparte por las toxinas. Se destruyen por secado o calentamiento. Por ejemplo, las hojas se pueden usar para té o sobres. Entre otras cosas, ayudan con el reumatismo, forúnculos, gota y úlceras.
consejos y trucos
Las hojas son mucho menos venenosas que las semillas. Sin embargo, es mejor usar guantes protectores de jardinería al manipularlos, por ejemplo, al trasplantar o cortar. De lo contrario, puede conducir a áreas de la piel irritadas.