La fotinia 'Red Robin' impresiona con sus brotes de hojas de color rojo brillante. Si la planta pierde repentinamente sus hojas, puede haber varias causas. Una ubicación adecuada y los cuidados adecuados evitan la pérdida de hojas.

Estos factores conducen a la pérdida de hojas:
- sequedad
- anegamiento
- permafrost
sequedad
Al igual que otras variedades de níspero glosado de hojas rojas, 'Red Robin' es sensible a la sequía. La humedad en el suelo es importante para que las plantas compensen la pérdida de agua. Si no reciben agua durante mucho tiempo en los meses de verano, pierden sus hojas. Los arbustos conservan energía para sobrevivir en condiciones subóptimas.
El riego regular apoya la vitalidad de la planta. El riego ocurre cuando la capa superior del suelo se ha secado. En los meses de calor, regar abundantemente. Al plantar, asegúrese de tener un lugar protegido en la semisombra. El sol directo combinado con vientos cálidos aumenta la evaporación del agua. Un sotobosque rico en hierbas favorece un microclima húmedo cerca del suelo. Como resultado, el agua se evapora más lentamente del suelo.
anegamiento
Las raíces del níspero no toleran condiciones demasiado húmedas en el sustrato. Si el agua retrocede, las raíces se pudrirán. Ya no absorben agua, lo que hace que las hojas se sequen y se caigan. Mientras que la sequía estresa a la planta, la humedad causa daños.
Al elegir la ubicación ideal para su níspero, evita el encharcamiento. A 'Red Robin' le gusta un sustrato bien drenado. El suelo arenoso es ideal porque el agua puede filtrarse fácilmente aquí. Los sustratos arcillosos o arcillosos pesados retienen el agua.
permafrost
Aunque 'Red Robin' es resistente, las temperaturas bajo cero prolongadas pueden dañarlo. En los duros meses de invierno, el suelo se congela en las capas más profundas. Las raíces del níspero no pueden absorber agua. La primavera siguiente pierden sus hojas verdes. Este fenómeno se ve favorecido por una ubicación soleada. El sol de invierno minimiza las reservas de agua de las hojas.
Riegue abundantemente su fotinia antes del invierno y busque un lugar semi-sombreado. Para protegerse contra las heladas del suelo, esparza maleza, ramas de abeto o vellón en el suelo. Las plantas de contenedores pasan el invierno en un lugar templado y protegido. Riegue estos arbustos regularmente cuando la capa superior del suelo se haya secado.