- La hiedra común como reverdecimiento de superficies y árboles
- ¿Es dañino el crecimiento de la hiedra?
En muchos jardines y parques con árboles maduros, a veces se pueden ver exuberantes zarcillos de hiedra trepando por los árboles y casi no se ve nada del tronco subyacente. Dado que la hiedra es una trepadora de raíces, surge la pregunta del posible daño: ¿se sofocará el árbol debajo de la vegetación? ¿Las raíces de las dos especies de plantas compiten entre sí? ¿Realmente siempre hay que quitar la hiedra?

La hiedra común como reverdecimiento de superficies y árboles
La hiedra común (Hedera helix) es la única trepadora de raíces en la flora nativa. Puede arrastrarse lejos o escalar hasta 30 metros usando sus raíces aferradas. La planta es tan popular como cubierta de suelo y como planta trepadora para reverdecer paredes, fachadas y troncos de árboles. Hedera helix también es importante como pasto para los insectos, porque las flores de color amarillo verdoso que aparecen entre septiembre y octubre son ricas en néctar. Esto es fácilmente aceptado por avispas, moscas y muchos otros insectos. Los frutos venenosos de color negro azulado maduran en primavera.
¿Es dañino el crecimiento de la hiedra?
Muchos jardineros creen que, debido a sus raíces, la hiedra penetra profundamente en la corteza del árbol y la daña. De hecho, sin embargo, en árboles más viejos con corteza pesada y corteza, la planta solo se adhiere superficialmente y solo a la superficie. Las raíces de la hiedra no penetran en la madera, no dañan el árbol ni le quitan ningún nutriente. Además, la hiedra es una planta de sombra que prefiere crecer en árboles con follaje denso y copa ancha. Por lo tanto, la planta trepadora no parece un ladrón de luz, especialmente porque rara vez penetra en las coronas y las crece demasiado. En resumen, se puede decir que el crecimiento de la hiedra no daña el árbol, al menos en principio.
Cuándo eliminar la hiedra y cuándo no
Los árboles más viejos y sanos no se dañan con el crecimiento de la hiedra. Sin embargo, la situación es diferente con los árboles jóvenes cuya corteza aún es delgada. Aquí tampoco penetran las raíces de la hiedra, pero la vegetación crea un ambiente propicio para el crecimiento de hongos, que a su vez penetran a través de la corteza aún sensible. Los árboles con corteza dañada también corren el riesgo de la hiedra por la misma razón. Además, la hiedra debe eliminarse de los árboles con ramas delgadas, ya que a menudo no pueden soportar el peso adicional. Los árboles frutales tampoco son adecuados como hospedantes, ya que los insectos que viven en la hiedra (como las avispas) pueden tener un impacto negativo en la cosecha.
consejos
Quitar la hiedra es una tarea tediosa. Funciona mejor si cortas repetidamente los zarcillos cerca del suelo y matas de hambre a la planta lentamente.