Anthurium andreanum rara vez se encuentra como decoración de una habitación, pero es extremadamente popular como una flor cortada exótica y de larga duración. Si recibiste un ramo como regalo o te lo regalaste a ti mismo en el que se usaron las llamativas flores, y tienes niños o animales en tu hogar, debes tener un poco de precaución.

La flor del flamenco es ligeramente venenosa.
Como todas las plantas de arum, el anthurium andreanum también contiene:
- ácido oxálico
- cristales de oxalato de calcio insolubles.
Cuando la planta se toca o se come, estos pueden penetrar en la piel y las mucosas y dañarlas. El resultado es irritación de la piel y quemaduras químicas menores. Los síntomas van desde dificultades para tragar y aumento de la salivación hasta náuseas, vómitos y diarrea. El sangrado gastrointestinal puede ocurrir en individuos particularmente sensibles.
consejos
Debido a la toxicidad de la planta, debes usar guantes al cambiar el agua y colocar el ramo de manera que los niños y las mascotas no puedan alcanzarlo.